La respuesta es muy sencilla: aquella que satisfaga nuestras necesidades a corto y largo plazo. Por ejemplo, si además de imprimir suele escanear documentos, hacer fotocopias y enviar faxes, lo mejor sería decantarse por una multifunción. Engloba todas estas tareas en un solo aparato, ahorrando una considerable cantidad de dinero, espacio y consumo energético. Y, por el contrario, si solo queremos imprimir en blanco y negro con un volumen mensual reducido, las impresoras de tinta monocromos son la opción más económica.
¿Necesitamos imprimir en A3? Este formato es muy utilizado por arquitectos, diseñadores gráficos y otros profesionales, ofreciéndonos un resultado de calidad impecable incluso con altas resoluciones. Hay que tener en cuenta que los equipos capaces de imprimir en A3 (297 x 420) también pueden hacerlo en A4 (210 x 297) y otros formatos más pequeños sin problemas.
Además, tenemos que tener en cuenta otras funciones, como la posibilidad de imprimir automáticamente a doble página para ahorrar papel o la alimentación automática de documentos, que permite a la impresora cambiar de papel sin que tengamos que intervenir, ahorrando tiempo y facilitando en gran medida las tareas de su empresa.